Querido diario,
sin tiempo para escribir, de un lado a otro, haciendo kilómetros y más kilómetros por el campus de Microsoft. ¡Esto es inmenso! Ahora hacia el edificio X, ahora hacia el Y, ahora hacia el Z …. Es un no parar. La sala 88888, la sala 99999, gente para arriba y para abajo, hablando por los pasillos, conectados a todas horas. Ahora ves un grupo, a la otra sesión otro, a la siguiente vuelves a encontrar al primero … A nivel de relaciones personales es muy gratificante terminando las conversaciones con “enjoy it”!.
Sesiones, sesiones y más sesiones hablando de tecnología: Windows Server, Azure, virtualización, almacenamiento, redes, dispositivos, productividad, ….
En el aspecto más lúdico, el lunes por la noche tuvimos la gala de bienvenida: comida, bebidas y una buena conversación con unos y otros, todos con todos, independientemente de la nacionalidad o especialidad. Destacable el plato estrella de la cena: una paella. Os diré que si mal no recuerdo ningún español probó la paella. El martes fue ya una cena más íntima con compañeros del grupo. ¡Cómo se pasan con los platos esta gente!. ¡Si casi nos traen media vaca! El tema de conversación sigue siendo el mismo, la tecnología. Es un lugar donde no te sientes descolocado cuando hablas, como suele ocurrir en los encuentros con las personas que te rodean. Ahora bien, si alguien de fuera nos oye hablar, seguro que nos trata de marcianos.
El miércoles tuvimos una cena informal con los jefes de producto, donde la conversación es más de tú a tú. Te saben escuchar y toman nota de todo. Es momento de terminar de compartir las inquietudes personales fuera de la clase. Es muy enriquecedor y clarificador saber que todos tenemos los mismos problemas, seamos de EE.UU., Japón, Hungría, Austria, Brasil, Australia, España, … Intentamos encontrar la mejor solución compartiéndolo con todos, para saber como lo resuelven o resolverían los demás.
El día no da para más, estamos cansados y con jetlag, pero muy contentos y con ganas de más (aun despertándonos entre las 4 y las 5 de la mañana del jetlag e ir a dormir a las 10 de la noche sin ningún respiro). Las sesiones son muy interesantes y provechosas. Ha valido la pena todo el esfuerzo para llegar aquí, en un lugar privilegiado para recibir esta información de primera mano, donde se comparten las experiencias y opiniones personales.
Encaramos la última jornada con los clusters de alta disponibilidad de Hyper-V, SQL Server y, como no, Azure!